A pesar de los esfuerzos de busvar programaciones alternativas, posponiendo fechas para dar margen a la mejora de la situación, eliminando modalidades deportivas de contacto para minimizar posibles riesgos, escogiendo sedes deportivas con las medidas de seguridad exigibles, al final, la propia evolución de la pandemia, peor de la esperada semanas atrás, ha acabado determinando la cancelación de las olimpiadas.
Confiando en que se den las condiciones para una nueva edición.
Mientras, ¡cuidaros mucho!